Concentrarse demanda ahora un mayor esfuerzo, así como lograr ser autónomo en la gestión del tiempo, sostuvo la experta durante el programa Saludable Mente de Andina Canal On line. Sin embargo, añadió, no todo está perdido porque existen algunas estrategias para encarar este proceso de mejor manera.
porque existen algunas estrategias para encarar este proceso de mejor manera.
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En todo este trabajo es muy importante la automotivación, que es el motor del
aprendizaje. Sin ella no hay forma de que el estudiante se concentre, se motive y pueda conducirse solo en un mundo virtual”.
El problema es que esta motivación se puede ver afectada por los distractores a los que se enfrenta el estudiante, quien ahora mientras estudia chatea con los amigos, come algún
bocadillo, escucha su música favorita y se le olvida que el aprendizaje requiere de concentración.
El estrés llega cuando ese mismo estudiante se da cuenta que no ha manejado adecuadamente su atención, que no tomó las notas necesarias y a última hora busca recuperar el tiempo perdido.
¡A levantarse de la cama!
La autonomía, que nos permite tener disciplina para lograr ciertos objetivos y tomar decisiones útiles, se forma desde la infancia y se fortalece a medida que uno va creciendo, asegura Altamirano.
La emergencia sanitaria que vivimos debido al coronavirus ha modificado completamente nuestra vida. Así, ahora ya no hay necesidad de cambiarse de ropa para ir volando a la oficina o al colegio, aspecto contraproducente cuando se trata de
estudiar.
El primer aspecto clave para crear un clima de estudio estimulante es levantarse de la cama y cambiarse de ropa, señala la docente de la Universidad San Martín de Porres (USMP) . No es un asunto menor porque, de esa manera, se predispone al cuerpo a entrar en una etapa distinta del día.
“Es fundamental que los niños y jóvenes tengan una rutina diaria, un horario para levantarse, vestirse y cambiarse como si fueran al colegio o la universidad. Observamos en muchos casos que los jóvenes están todo el día con el pijama y si estudian lo hacen sobre la cama, pero ¿a qué nos invita una cama? A descansar, a dormir, a relajarnos y eso es una barrera para concentrarse en los estudios”, advirtió.
Otro aspecto fundamental es tener un lugar definido para estudiar. Puede ser dentro de la misma habitación, pero si no lo hay, podría ser en un algún ambiente común del hogar, procurando que haya el menor tráfico posible para evitar
distracciones.
Los estudiantes deben tener un lugar definido para estudiar dentro de casa
Antes de cada clase, los alumnos deben verificar que su computadora esté operativa, cargada, que los materiales a necesitar al momento de la clase -como blocks, lapiceros- estén a la mano; a la par de sacar todo aquello que contribuya a perder la concentración.
Una vez conectado, dijo, los
estudiantes deben participar en clase, “hacerse notar”, aclarar las dudas que puedan tener y luego repasar de manera individual o grupal lo aprendido.
Los tímidos han "despertado"
Si bien los expertos ponen el foco con mayor énfasis en las complicaciones que surgen a propósito de la enseñanza virtual, esta también ha generado aspectos positivos que son poco conocidos.
En primer lugar, muchas clases quedan grabadas y por tanto se puede volver a ellas nuevamente para repasar. A esto se suma que, al no haber presencialidad, los chicos ya no sienten tanto temor de participar en clase, toda vez que existe una pantalla que “los protege” de ser juzgados.
“En el departamento psicológico recibimos comentarios que los alumnos que eran tímidos ahora se atreven a participar. La virtualidad y la comunicación interactiva es más cómoda para ellos. Tienen dificultades para manifestarte, pero para eso está el profesor que debe dar pautas para que el alumno se sienta estimulado a compartir sus inquietudes”, comentó.
Es importante motivar a los estudiantes para que participen en clase y resuelvan sus dudas
La estimulación de los estudiantes debe ser un aspecto permanente, señaló, tarea que no solo recae en los docentes, sino también de los padres, quienes deben acompañar a sus hijos con frases motivadoras: “tú puedes lograrlo” “lo único que tienes que hacer es atreverte”, reiterando que la escuela y la universidad están para enseñar, que esto se trata de “ensayo y error” y que, ante la duda, la mejor salida es preguntar y aclarar lo confuso.
Si no se atreve a hacerlo en clase, se puede apelar a consulta vía chat, pero nunca quedarse con la duda.
No más de 20 minutos
La psicóloga explicó que la autonomía y motivación son fundamentales para aprender; sin embargo, es bueno no olvidar que la concentración dura poco tiempo, entre 6 y 20 minutos, tiempo después del cual empieza a diluirse.
Es esencial que los padres lo sepan, sobre todo si tienen
hijos pequeños, quienes se distraen muy rápido. Ante esos casos, aconsejó dar un respiro al menor y volver a comenzar con las clases con ánimo.
En el caso de los universitarios, las clases son más prolongadas y requerirá de mayor compromiso de parte de ellos, pero también deben tener pausas para comer un bocadillo o estirarse.
Para los padres que hacen
trabajo remoto y deben apoyar a sus hijos en la estrategia Aprendo en casa, les pidió mantener la calma y diseñar estrategias orientadas a ir ganando independencia y seguridad.
“Con los hijos pequeños, así como tenemos que practicar diversas herramientas tenemos que practicar el silencio, el escucha lo que dice tu profesora, participa. Es fundamente que los padres se dividan las responsabilidades en casa.
Cuantos más niños haya será un poco más complicado, pero hay que mantener la calma”, sostuvo la psicóloga.
Pidió ser vigilantes con el tiempo que los menores pasan frente a la pantalla porque, si bien ahora casi todo se debe hacer a través de una computadora, debe haber momentos para desconectarse de ella.
“Muchos chicos se quedan en la computadora más de 12 a 14 horas conectados, pero no están estudiando. Muchos chicos tienen problemas de
adicción a los videojuegos y no quieren ni comer, ni descansar, solo quieren el juego. Para evitar que los menores caigan en una situación hay que asegurarnos que realicen otras actividades. No es saludable estar tantas horas frente a las pantallas, ni por cuestiones físicas ni
mentales”.
Padres deben estar atentos a la horas que sus hijos pasan frente a dispositivos tecnológicos para evitar adicción
La experta de la USMP indicó que es necesario que se rescate el placer que genera el aprender, darle ese sitial y no mirarlo como un castigo. "Si se parte de esa mirada, los chicos comenzarán su día con otra sensación, con una actitud positiva frente a las actividades que desarrollamos".
Pidió a los padres ver que la pandemia ha traído una serie de retos, pero también beneficios como recuperar la unión familiar así como una mayor demostración de afecto.
“Antes los niños iban al colegio 8 horas al día y los universitarios ni qué decir, solo venían a dormir y ahora todos están en casa. Que habrá momentos de estrés, sin duda alguna, pero hay todo un
aprendizaje de vivir juntos que nos va moldeando a través de estímulos, de ejemplos que pueden servir también para ayudarlos en sus labores de aprendizaje".
Finalmente, recomendó a los padres estimular los pequeños logros de los hijos tengan la edad que tengan, premiarlos con “un chocolatito, un abrazo fuerte, una sonrisa, un paseo de 10 a 15 minutos al parque. "La
autonomía que ganen los chicos ahora les servirá para toda la vida”.